Los pendientes de novia son un complemento fundamental para el día de tu boda. Sin embargo, pese a ser un elemento fundamente en el look de novia, nunca deben eclipsar al vestido, que es sin lugar a dudas el protagonista.
Si eres de las personas que te encantan los pendientes extravagantes, para el día de tu boda te aconsejo que elijas un modelo más discreto que no haga sombra al vestido y que te aporte luz al rostro sin distracciones. Además, los pendientes no son las únicas joyas que puedes lucir el día de tu boda. Así que si quieres combinar los pendientes con otras joyas, nuestro consejo es que optes por modelos más clásicos.
Una opción que nos encanta y que nunca pasa de moda son los pendientes de novia con diamantes y terminados en una perla. Este tipo de pendientes de novia ¡Son un acierto seguro!
La perla concentra las miradas de los invitados al proporcionar claridad al rostro. Por otro lado, es una pieza que podrás ponerte en muchas más ocasiones sin ningún tipo de problema. Los pendientes de novia de diamantes, con o sin perlas, son tendencia y la joya perfecta para las novias que buscan un complemento que no les reste protagonismo.
Puedes encontrar un sinfín de variantes de estos clásicos pendientes, la elección final dependerá de tu estilo, el vestido y el peinado que lleves. También tienes que tener en cuenta el tamaño de los pendientes, los pendientes más largos son ideales para novias con el cuello más estilizado y largo.
Los pendientes semilargos son perfectos para las novias que tienen un rostro más bien redondeado y un cuello ni largo ni corto.
Y los pendientes cortos son ideales para novias con un cuello más pequeño.
Pero por encima de todo, elije unos pendientes con los que te sientas cómoda, sin sentir que vas disfrazada. Y piensa la utilidad que puedes dar a esos pendientes en un futuro.
Y a ti, ¿Qué tipo de pendiente te gusta más? ¿Largo, semilargo o corto? ¿Con o sin perla?
